Para el IV Aniversario del Movimiento Disfrutista se propone una celebración experimental de la ciudad de Barcelona. Skate it es un evento abierto para recorrer las topografías urbanas con diversos medios (monopatín, longboard, waveboard, patines, patinetes, bici, etc.) jugando con sus desniveles, escuchando a los pavimentos, deslizando por sus barandillas, fluyendo a la deriva, imponiéndonos nuevos retos y en definitiva celebrando la ciudad.
 

EL VIAJE DE ARQUITECTURA DE URUGUAY

En la gestación del Cuarto Manifiesto Disfrutista se desarrolló un interés especial por el viaje, el viaje como uno de los acontecimientos más intensos en el que el individuo experimenta una espontánea, impredecible y enriquecedora formación vital.

Estas inquietudes por el viaje como herramienta formativa, de algún modo resuenan en diversos foros y culturas académicas, pero pocos casos se acercan tanto como el Viaje de Arquitectura de Uruguay, una experiencia extraordinaria donde desde la gestación del viaje y las ideas para su financiación, hasta el desarrollo del mismo, se ponen en práctica una serie de estrategias que repercuten en la cultura arquitectónica, complementando la formación no sólo con el viaje sino implicando a todo lo que le rodea, convirtiéndolo en un auténtico acontecimiento, un evento de una intensidad enorme, que trasciende sus propios límites temporales y disciplinares.
 

“El Viaje de Arquitectura de Uruguay es un proyecto desmesurado. Una tradición inverosímil con más de sesenta años de práctica. Los estudiantes de la facultad de arquitectura idearon esta instancia de aprendizaje basada en una organización compleja que genera recursos y multiplica sus efectos. Básicamente, el Viaje funciona como un productor de experiencia que culmina en un Grand Tour, y le da el nombre a una serie de pasos previos que son tan interesantes como el propio viaje, por ejemplo: año a año la construcción de una casa por los alumnos.”[1]

 


[1] DANZA, Marcelo y CAPANDEGUY, Diego. Casas inventadas y un viaje imposible. Artículo aparecido en UR Arquitectura, nº3 (Organizar).Montevideo, 2010.

 
 
 
En las palabras de Marcelo Danza y Diego Capandeguy se hace evidente la capacidad de este proyecto anual de dimensiones colosales: un proyecto que arranca de los estudiantes, los verdaderos protagonistas de la Universidad, un proyecto sostenible que idea sus propias estrategias para generar los recursos que necesita, estrategias que por otra parte añaden experiencia y despliegan raíces en el medio socio-cultural, eludiendo el habitual carácter introvertido de los circuitos arquitectónicos.
El Viaje de Arquitectura de Uruguay se define como una gran empresa que se autogestiona por más de doscientos cooperativistas que van cambiando año a año. Se organiza un concurso de estudiantes para construir una vivienda experimental, permitiendo un primer contacto con la realidad de la construcción en el umbral de la profesión. Se organiza la llamada Arquitectura Rifa en busca de propietario para las viviendas experimentales, un sorteo cuyos beneficios financiarán el viaje de los estudiantes, un itinerario de unos ocho meses alrededor de todo el mundo.
Las viviendas experimentales se construyen y dibujan un interesante mapa de la historia de la arquitectura reciente en Uruguay. Se habitan, se testan, permiten desarrollar experiencias y avanzar en el interés universitario por la construcción de conocimiento. Pero está claro que el experimento va mucho más allá de las habituales dinámicas universitarias. El viaje está organizado, aparece un calendario inicial con una serie de lugares y fechas, espacios y tiempos a respetar. El resto está por escribir. Por delante, toda la riqueza de emociones e interesantes sorpresas que la incertidumbre ofrece.
 
Para el IV aniversario del Movimiento Disfrutista se propone la interacción con el Viaje de Arquitectura de Uruguay a su paso por Barcelona, preparándose un evento internacional ligado a la más directa experiencia de los lugares arquitectónicos y del paisaje urbano. Skate It será de nuevo un acontecimiento extraordinario de reconocimiento sensorial de las topografías urbanas. Barcelona, reconocida mundialmente por su patinabilidad, se convertirá por unos días en el escenario de múltiples skatectos que subirán y bajarán topografías pensadas por los arquitectos más “cool”, grindarán sus remates de acero inoxidable, pondrán a prueba mediante “slides” sus barandillas más refinadas, y pasarán por encima de elementos urbanos enfermos de diseñitis con diversos tipos de “Ollie”: “flip”, “varial”, “to fakie”, “imposible”, etc.
 
La llegada a Barcelona del Viaje de Arquitectura de Uruguay se prevé como un intenso evento experiencial en el que los arquitectos viajeros, en la etapa final de su ruta, gastarán sus últimas energías, explotando emocionalmente y contaminando a la ciudad de todo aquello que acaban de absorber.